Los desfibriladores externos y automáticos se encuentran comúnmente en aeropuertos, centros comerciales, escuelas y otros lugares públicos donde se reúne la gente. Shouke® cuenta con personal técnico profesional involucrado en la producción y personal profesional de posventa para realizar un seguimiento de la situación.
Los desfibriladores externos y automáticos (DEA) son parte de una amplia cadena de supervivencia que incluye la identificación temprana, la RCP temprana, la desfibrilación temprana y la atención médica avanzada.
Aunque los desfibriladores externos y automáticos están diseñados para ser fáciles de usar y pueden ser utilizados por personas con una formación mínima, algunas personas no deberían utilizarlos. Aquí hay algunas pautas generales:
Niños menores de cierta edad o peso:Algunos desfibriladores externos y automáticos tienen parches o configuraciones pediátricas específicas; asegúrese de seguir las instrucciones del dispositivo. En algunos casos, se puede recomendar el uso de pads pediátricos o llaves pediátricas para niños menores de cierta edad o peso.
Personas no capacitadas para utilizar:Aunque los desfibriladores externos y automáticos están destinados a personas sin una formación médica exhaustiva, se recomienda que los usuarios reciban formación básica en RCP y DEA. La capacitación ayuda a los usuarios a sentirse más seguros y garantiza que sigan los procedimientos correctos.
Personas con ciertas condiciones médicas:Se puede recomendar a las personas con determinadas afecciones médicas que no utilicen desfibriladores externos y automáticos. Esto puede incluir personas con alergias conocidas al adhesivo de las almohadillas de los electrodos o aquellas con afecciones que les impiden operar el dispositivo de manera segura.
Personas en agua o humedad:Los desfibriladores externos y automáticos no deben utilizarse en personas que se encuentren en agua o humedad, a menos que el DEA específico esté etiquetado como resistente al agua. El agua es conductora y el uso de un DEA en esta situación podría suponer un riesgo para los rescatistas y las personas en peligro.
Personas sobre superficies metálicas:Evite el uso de desfibrilador externo y automático en personas que tengan contacto directo con superficies metálicas porque el metal puede conducir la electricidad. Antes de utilizar un DEA, traslade a la persona a una superficie seca y no metálica.
Personas con una orden de no reanimar (DNR):En algunos casos, una persona puede tener un documento legal llamado No reanimar (DNR), que establece que no desea someterse a medidas de reanimación, incluida la desfibrilación. En este caso, se deben respetar los deseos de la persona.
Es importante tener en cuenta que estas son pautas generales y que las instrucciones específicas pueden variar según las recomendaciones del fabricante y la capacitación recibida. Además, las leyes y regulaciones relativas al uso de desfibriladores externos y automáticos pueden variar según la jurisdicción, por lo que es fundamental comprender y seguir las pautas y protocolos locales. En caso de duda, lo mejor es buscar orientación de un profesional médico de urgencias.
En el caso de un paro cardíaco, una acción rápida y eficaz es crucial para salvar la vida de una persona. La secuencia de medidas recomendada incluye una combinación de reanimación cardiopulmonar (RCP) y el uso de un desfibrilador externo y automático. Aquí hay una guía paso a paso:
Reconocimiento de paro cardíaco:
Si alguien se desploma y deja de responder, reconozca que puede haber ocurrido un paro cardíaco.
Activar respuesta de emergencia:
Llame a ayuda médica de emergencia de inmediato (por ejemplo, marque el 911). Si hay otras personas cerca, indique a alguien que llame para pedir ayuda mientras inicia la RCP.
Comience la RCP:
Comience las compresiones torácicas a un ritmo de 100 a 120 compresiones por minuto. Deje que el pecho retroceda completamente entre compresiones. Si está capacitado, incorpore la respiración artificial a la secuencia.
Recupere y active el DEA:
Encuentra el desfibrilador externo y automático más cercano y enciéndelo. Los DEA suelen proporcionar indicaciones de voz claras e instrucciones visuales.
Instale la almohadilla del electrodo:
Abra las almohadillas de los electrodos y colóquelas en el pecho desnudo de la persona.
Analizar el ritmo cardíaco:
Deja que el desfibrilador externo y automático analice el ritmo cardíaco del paciente. Asegúrese de que nadie entre en contacto con esta persona durante este análisis.
Manténgase alejado y aplique una descarga (si se recomienda):
Si el DEA recomienda una descarga, aléjese de la persona y presione el botón de descarga como se indica.
Reanudar la RCP:
Después de la descarga, el desfibrilador externo y automático puede indicarle que reanude la RCP inmediatamente. Continúe las compresiones torácicas hasta que se proporcionen más instrucciones.
Siga los consejos del DEA:
Continúe siguiendo las indicaciones visuales y de voz proporcionadas por el desfibrilador externo y automático. Le guiará sobre cuándo reanudar la RCP y cuándo detenerla y reevaluar el estado del paciente.
Activar servicios médicos de emergencia:
Si no lo ha hecho, active los servicios médicos de emergencia y continúe siguiendo las indicaciones del DEA hasta que llegue ayuda profesional.
Es importante tener en cuenta que la RCP temprana proporciona algo de flujo sanguíneo al corazón y al cerebro, y la desfibrilación temprana con un desfibrilador externo y automático es fundamental para restaurar el ritmo cardíaco normal. La activación inmediata de los servicios médicos de emergencia y el cumplimiento de las instrucciones del DEA pueden mejorar significativamente las posibilidades de supervivencia en una emergencia cardíaca. Como fabricante profesional, Shouke® recomienda que, si no está seguro o no está capacitado, busque orientación de un profesional médico de emergencia. Considere realizar un curso básico de capacitación en RCP y DEA para estar mejor preparado para esta situación.